Kyosuke y Takuboku son dos poetas japoneses con mayor o menor éxito. Un día, sin querer, son testigos de un crimen y ayudarán a resolverlo.

Se produce el asesinato de una mujer en un burdel de la ciudad. Y esta vez el asesino parece estar más cerca de lo normal.

¿De verdad pudo Kindaichi asesinar a la pobre mujer? ¿Qué ocurrió en realidad esa fatídica noche entre Otaki y Kindaichi?

Le solicitan a Ishikawa que investigue algo realmente extraño: en lo alto de la torre parece que hay un fantasma, pero nadie sabe si es real o es algo falso.

En los burdeles también surgen historias de amor. Pero no siempre esas historias acaban llegando a buen puerto por mucho que se desee.

Circula un rumor sobre una muñeca que cobra vida y ataca a los hombres incautos que caminan solos por la ciudad. ¿Será cierto el rumor?

En la ciudad hay un ladrón que está robando una gran suma de dinero a empresarios. Aunque lo atrapan, no hay ni rastro del dinero robado.

Mientras la salud de Ishikawa empieza a preocupar a sus allegados, recibe una nueva propuesta para investigar un caso.

Ishikawa sigue con la investigación del último caso y trata de ver una posible relación entre los diferentes asesinatos en los que estuvo trabajando.

Ishikawa se encuentra cada vez más golpeado por la enfermedad y ahora lo aflige una fuerte depresión de la que no parece poder escapar.

Ishikawa acepta un nuevo caso de detective, pero como está ocupado escribiendo su novela le pide ayuda a su viejo amigo.

Parece que todos los casos previos tenían un nexo en común, e Ishikawa cree tenerlo todo resuelto.