Las vueltas que da la vida: Lista de episodios

En la noria, como en la vida, crecemos y disfrutamos compartiendo viajes con los demás, aunque las dos tengan sus vaivenes.

Reímos, disfrutamos, compartimos… pero sabiendo que en algún momento la vida, como la noria, dejará de girar.

¿Qué sería de una noria sin las personas que se suben a ella? Compartir es vivir.

Los giros inesperados forman parte de la vida, situaciones que hacen que tu estabilidad esté colgando como la cabina de una noria.

En el primer capítulo nuestras protagonistas se asoman de nuevo a la incertidumbre del más allá pero desde el legado que nos han dejado y del que dejaremos a los que vengan después de nosotros. ¿Te subes a la noria?

¿Qué sería de la noria sin las personas que nos acompañan en ella? En lo más alto o en lo más bajo nuestros familiares y amigos forman parte de cada vuelta. Este segundo capítulo abre la puerta a lo bueno y lo malo que nos dejan, esa herencia no material con la que nos toca vivir.

En el tercer capítulo toca tirar de memoria y anécdotas, un viaje en el tiempo para reflexionar sobre lo que fuimos, somos y queremos ser. ¡Aceptémoslo! Ver los años pasar nos aterra… pero también nos revigoriza. Porque nos da la experiencia y nos hace aprender, aunque nos llevemos algún que otro susto de camino.

Y con la cuarta vuelta llega el fin: en el último capítulo hablamos de lo imprevisible. Porque la vida y sus vueltas van de eso, de lo que no esperas pero puede suceder. ¿Y entonces qué? Toca reponerse y sumar una anécdota más a la lista.

Boris Izaguirre es el anfitrión que le da la vuelta a la Navidad rompiendo los esquemas clásicos de esta tradición, para celebrar simplemente que estamos felices a pesar de todas nuestras diferentes rutas de vida. No hace falta esperar todo un año para celebrar la Navidad, es mejor celebrar la felicidad.

Blanca Romero se casa con ella misma y celebrará su propia boda. La vida le ha demostrado que siempre estuvo y funcionó mejor sola y quiere celebrar su sologamia cambiando los clásicos rituales nupciales. Además, la boda será el pretexto para hablar de estados civiles, familia, hijos... y de la libertad de las elecciones de vida.

Bibiana Fernández, que acaba de cumplir 70 años, aprovechará para despedir la década, lo que dejamos atrás rompiendo las estructuras de las clásicas despedidas de soltera. Pero en realidad descubriremos que no estamos despidiendo el pasado, estamos dando la bienvenida al futuro.

Carolina Iglesias quiere celebrar el aniversario de una desgracia, de todos aquellos momentos de la vida que son bajos pero que luego sirven como lección de vida o como inicio de un futuro mejor. Un cumpleaños muy especial en el que brindaremos por las "felices desgracias" de cada uno.