Eternia celebra que Teela es su nueva Man-At-Arms, pero la ceremonia de nombramiento se ve interrumpida cuando Skeletor lanza un ataque a gran escala contra Grayskull.

Teela y su compañera, ahora mercenarias, aceptan el desafío de una misteriosa mujer: recuperar un antiguo cáliz que se encuentra dentro de la Montaña de la Serpiente.

Mientras defienden una aldea de la tecnosecta de Tri-Klops, el grupo de Teela se topa con Man-At-Arms, que trata de mantener con vida a Orko usando agua encantada.

Separada de sus compañeros en Subternia, Teela hace frente a una siniestra entidad que le ofrece la mitad de la Espada del Poder a cambio de sus miedos.

Una cara conocida advierte a Teela y los demás de que podría ser imposible huir de Preternia. Roboto arriesga su cuerpo mecánico para volver a forjar la Espada del Poder.

Mientras la Hechicera, Adam y los demás observan con total impotencia, Skeletor usa su nuevo poder para hacer el mal y sumir Eternia en el caos.

Adam invoca el poder de Grayskull sin empuñar la espada y se enfrenta a Skeletor, para luego fijar sus miras en un objetivo inesperado.

Evil-Lyn, que empieza a cuestionar las intenciones de Skeletor, rememora el momento en que conoció al tirano sediento de poder y decide hacer algo inesperado.

Teela, consciente de su legado, recurre a sus poderes para pedir ayuda en la lucha contra Evil-Lyn. Entre tanto, Adam forja una alianza con alguien impensable.

Teela asume su nuevo papel y Adam recupera la Espada del Poder mientras la batalla final por el futuro de Eternia (y del universo entero) da comienzo.