El detective Rob Brady y la investigadora en prácticas Billie Fitzgerald acuden al escenario de un crimen espantoso: un hombre ha aparecido colgado de un árbol con varias puñaladas en su cuerpo. La sargento Vivienne Cole espera ponerse al frente de la investigación, pero no tarda en enterarse que el caso recaerá en el inspector David Bradford, que ha estado de baja desde la desaparición de su esposa.

Un chico es asesinado en su despedida de soltero, y el hombre que denuncia el crimen es el ex marido de la novia. Los detectives se apresuran a encontrar al padrino de 18 años que ha desaparecido, desconociendo de momento si puede haber sido el asesino u otra víctima.

Un hombre aparece asesinado en su casa flotante, pero la mujer que alertó a la policía ha huido del lugar. Cuando Vivienne y Billie interrogan a la viuda de la víctima, descubren que tenía una aventura con la mujer de su mejor amigo.

Cuando el cuerpo de una mujer aparece en la orilla del río, los detectives rastrean a un sospechoso a través de un sitio de citas. Sin embargo, cuando dan con él descubren que pudo haberse disparado a sí mismo. Mientras Rob y Vivienne intentan discernir si se trata de un asesinato o suicidio, Billie se preocupa por Amber, una testigo de otro caso.

Con Billie herida después de ser apuñalada y su atacante suelto, Vivienne se culpa por no detectar que pudiera estar en peligro. Además, mientras el equipo se esfuerza por localizar a Amber, descubren que hay más de lo que parece.

Unos obreros de la construcción encuentran los restos de un joven que parece haber muerto estrangulado hace más de un año, pero cuando se avisa a su hermana, ésta afirma que le ha estado enviando postales durante todo este tiempo. Los detectives sospechan de la implicación de los compañeros de piso de la víctima, que parecen ocultar algo.

Un niño de ocho años encuentra a su abuelo muerto en el sótano de un pub, y le dice a Rob que fue golpeado por un hombre con un bate de béisbol, aunque Vivienne duda de la veracidad de su historia. Más tarde, Vivienne presiona a Rob para que informe de que encubrió a David la noche de la desaparición de Sarah.

Mientras el equipo investiga el asesinato de una au pair portuguesa que acaba de ser despedida de su trabajo, Vivienne y Rob empiezan a investigar a David a escondidas, pero este va un paso por delante de ellos.

Cuando un padre y su hijo son ejecutados a plena luz del día, los detectives sospechan de inmediato que se trata de un asesinato ordenado por el crimen organizado, y temen que la violencia se intensifique. David ve una oportunidad para detener finalmente al capo del crimen Adrian Cook.

A cambio de hacer la vista gorda, Adrian le da a Rob el nombre de alguien que sabe dónde está Sarah, pero esa persona aparece muerta. Ahora que creen que Sarah puede estar viva, David y su equipo corren para encontrarla.

Un sargento fuera de servicio encuentra a un hombre muerto al volante de su furgoneta, y los detectives relacionan a la víctima con una mujer que fue asesinada mientras estaba bajo custodia policial. El caso afecta profundamente al detective Rob Brady porque fue quien descubrió el cadáver de la chica. Más tarde, un agente en prácticas, Billie Fitzgerald, encuentra una conexión con un joven policía

Cuando el estudiante Luis Moretti es encontrado muerto en un lago, los detectives encuentran una posible conexión con el reciente suicidio de una joven. Mientras tanto, la sargento Vivienne Cole le dice a David que cree que el detective jefe Mulgrew está detrás de la amenaza a la familia de Rob, y le revela una relación pasada con el jefe.

Tras el asesinato de un cerrajero, Billie reconoce a la víctima y se entera de que fue testigo de la muerte de su padre diez años antes. La investigación la pone cara a cara con el asesino de su padre y la obliga a luchar contra su ética personal y profesional. Por su parte, Vivienne le ruega a su exmarido que haga lo correcto, pero él teme que ambos estén en peligro.

Un cuerpo encontrado en una maleta es identificado como el de un hombre que lleva dos semanas desaparecido. Cuando el equipo informa a su viuda, Cassidy, esta parece no estar afectada y señala a su cuñado, Charlie. Pero Charlie afirma que Cassidy es una maníaca del control a la que su hermano planeaba abandonar. ¿Qué se esconde tras la frágil apariencia de Cassidy?

Cuando otro policía negro es asesinado, el equipo sospecha que puede ser una nueva víctima del policía asesino. Después de hablar con el sargento Durrant, que trabajó con la víctima en varios cacheos en las horas previas a su muerte, los detectives sospechan que los crímenes podrían tener una motivación racial. Además, David y Vivienne cruzan una línea muy peligrosa.