Años después de haber sido encerrado, el mitad demonio Inuyasha se despierta cuando la estudiante Kagome regresa en el tiempo al periodo Sengoku.

Kagome, que tiene el poder de controlar a Inuyasa, descubre que podría ser Kikiyo, la reencarnación de la hermana mayor de Kaede que encerró a Inuyasha.

Kagome e Inuyasha se necesitan para reunir los restos de la Perla de Shikon. Sin embargo, no se llevan bien.

En el presente, Kagome se encuentra descansando en casa cuando Inuyasha llega a buscarla, así que vuelve con él al pasado para encontrar a Yura.

Sesshomaru, el hermanastro de Inuyasha, aparece buscando la tumba de su padre, que había sido un demonio perro. Kagome descubre información sobre el pasado de Inuyasha.

A pesar del empeó de Kagome en boicotearle. Sesshomaru da con la localización de la tumba del padre de Inuyasha, que contiene la espada que desea.

Kagome retira la espada Tessaiga del altar y Sesshomaru intenta matarla. Esto enfada a Inuyasha y provoca un duelo entre hermanos.

Inuyasha y Kagome conocen a un joven samuraí llamado Nobunaga, cuyo señor ha sido poseído por un demonio sapo. Juntos, parten al rescate de una princesa.

Durante el viaje, Inuyasha y Kagome conocen a Shippo, un joven demonio zorro que roba un pedazo de la Perla de Shikon como venganza por el asesinato de su padre.

Inuyasha se bate en duelo con Hiten mientras Shippo intenta usar su magia para salvar a Kagome de Manten. Sin embargo, los hermanos Raijuu no son un enemigo fácil.

Cuando Kagome regresa al presente, el poder de la Perla de Shikon provoca el ataque de una máscara noh a su abuelo.

Inuyasha encuentra un demonio que, de manera benévola, guía a los espíritus de los niños. Mientras tanto, Kagome conoce el espíritu de una chica llamada Mayu.

Después de rescatar a una chica llamada Nazuna, Inuyasha y Kagome pasan juntos la noche en un templo y descubren cosas sobre la transformación de Inuyasha.

Inuyasha y los demás se encuentran con la bruja Urasue, que roba las cenizas de la tumba de Kikyo, la sacerdotisa que encerró a Inuyasha. Está decidido a detenerla.

Urasue secuestra a Kagome para poder resucitar a Kikyo. Y cuando esta vuelve a la vida, inmediatamente intenta matar a Inuyasha.

Miroku, un monje mujeriego, ha estado recopilando trocitos de la Perla de Shikon. Cuando roba los de Kagome, Inuyasha lo persigue para recuperarlos.

Un artista llamado Kotatsu sueña con controlar un ejercito de ogros alimentados por una joya sagrada. Inuyasha y el resto tendrán que ver si deciden impedírselo.

Naraku le da a Sesshomaru un brazo humano con un trozo de la Perla de Shikon incrustado. Así, Sesshomaru puede intentar recuperar la espada Tetsusaiga.

Kagome resulta herida durante el enfrentamiento entre Inuyasha y Sesshomaru. Cuando Inuyasha descubre el plan de Naraku, teme por su vida.

Kaede lleva a Inuyasha y Miroku a una cueva cercana que aparecía en su pasado y en el de Kikyo. Mientras tanto, Kagome intenta adaptarse a su vida normal.

Inuyasha y Royakan siguen luchando. Kagome interrumpe su cita con Hojo para volver al santuario, dónde percibe la presencia de la joya.

Al parecer, Kikyo ha resucitado y está viviendo en el pueblo como una sacerdotisa. Un monje errante se da cuenta de que con ella no todo es lo que parece.

Inuyasha busca a Kikyo, pero Kagome la encuentra primero. Kikyo la hace prisionera y no la escucha cuando quiere darle explicaciones sobre lo que realmente ha pasado.

La cazademonios Sango, su padre y su hermano menor, Kohaku, dejan su pueblo indefenso tras acudir al castillo Hitomi en respuesta a una invitación.

Sango cree que Inuyasha es su enemigo y lo busca de manera insensata para vengarse. Esto está orquestado por Naraku, que quiere la muerte de Inuyasha.

Inuyasha y sus amigos se detienen para enterrar a los muertos, y Sango revela el secreto del origen de la Perla de Shikon: El alma de la sacerdotisa Midoriko.

Inuyasha y sus amigos descubren un pueblo en el que sacrifican niños para su dios local del agua. Allí conocen a un niño llamado Taromaru, que necesita su ayuda.

Cuando el grupo visita una aldea para exterminar unos demonios, Miroku se fija en una hermosa mujer de aquella aldea, pero ésta en realidad desea matar a Miroku y muestra su verdadera forma como una mantis religiosa, al reaccionar, él la absorbe pero las tenazas de aquel monstruo desgarran el agujero negro de su mano, haciendo que se abra aún más.

Mientras Kagome se ve presionada llevando una vida tan agitada yendo y viniendo de la época feudal y el presente, Naraku tiene pensado un plan para derrotar a Inuyasha y sus amigos con la ayuda de Kohaku, el hermano de Sango. Inuyasha huele un hedor a sangre proveniente de un pueblo.

Después de una batalla contra su hermano, Sango se ve obligada a robarle la Tessaiga a Inuyasha, para salvar la vida de su hermano, y entregársela a Naraku. Sango se ve arrepentida de sus actos y, en el castillo de Naraku, luchan contra él.

Después de la batalla anterior, Kirara y Sango se ven afectadas por la batalla contra Naraku, e Inuyasha y Kagome deciden ir en busca de plantas medicinales. Durante el camino al campo de plantas medicinales, se encuentran con unos aldeanos socorriendo a una mujer víctima de un monstruo que devora hombres, Aquellos decían que eran fechorías causadas por Jinenji, ya que era el único hombre mitad bestia que habitaba en aquel pueblo.

Mientras que la sacerdotisa Kikyo cura a unos soldados de guerra, vienen unos guardias enviados por Naraku, pero no se percata de que es Naraku porque ella sólo conoció a Onigumo. Naraku se aprovecha de ella y la secuestra.

Cuando Kikyo está de rehén ante Naraku, éste le pide que venza a Kagome, para ello, Naraku le da un alma malvada. Muy lejos de ahí, se encuentra el grupo de Inuyasha y sus amigos los cuales ven a las almas flotantes de Kikyo y las siguen, al hacerlo, Sango se percata de que es una trampa y aquello se convierte en una ilusión de la muerte.

Totosai, el forjador y creador y de las dos espadas de colmillo, tiene un problema, está siendo perseguido por Sesshomaru para que le haga una espada igual de fuerte que la Tessaiga, ya que tiene en su poder una espada, que no lo complace, la Tenseiga, forjada con uno de los colmillos de Inu no Taisho también, que sirve para revivir a incontables muertos o curar con sólo agitarla.

En la batalla, Inuyasha ve la fricción de los vientos abriendo una abertura, en ésta, ondea la espada haciendo el Kaze no Kizu, hiriendo gravemente a Sesshomaru. A punto de morir, Sesshomaru es atendido por una extraña niña llamada Rin, la cual vivía maltratada en un pueblo que es atacado por lobos y al escapar de ellos, no alcanza a ir con Sesshomaru para protegerse y muere destazada por los lobos.

Koga es el jefe de los lobos y empieza a pelear con Inuyasha , Kagome ve los fragmentos que tiene aquel hombre lobo, y debido a su instinto, Koga huye, pero al llegar a su campamento se le ocurre una idea para conseguir los fragmentos más fácil; secuestrar a Kagome.

Después de que Koga secuestrara a Kagome, éste le pide que sea su mujer para toda la vida, sin embargo, ella lo rechaza ya que su compañero es Inuyasha y ella está enamorada de él. Ante la negativa de Kagome, Koga promete destruir a Inuyasha para quedarse con ella. Después, van con sus enemigas mortales, unas extrañas aves, llamadas Aves del paraíso.

Después de la pelea de Inuyasha con Kagome, ella regresa a su época y va a su escuela más seguido después de esa pelea. Inuyasha piensa todo el tiempo en Kagome y en si ir a su época y hablar con ella, mientras que Kagome empieza a hablar de él como su novio y pareja.

Durante un asalto a un castillo, los lobos de Koga son asesinados por una misteriosa mujer quien intenta atraer a Koga hacia el castillo utilizando un fragmento corrupto de la Perla de Shikon.

Inuyasha está a punto de ser derrotado por Koga, cuando Kagura, el espíritu de los vientos, hace su aparición y derrota a Koga con facilidad. Inuyasha no puede utilizar el Kaze no Kizu contra Kagura, quien es capaz de controlar el viento, hasta que Kagome purifica el aire con sus flechas.

Miroku se encuentra inesperadamente con Koharu, una jovencita que se había enamorado de él y había huido de su aldea. Mientras tanto, Kagura, quien es una extensión de Naraku, y su hermana menor Kanna, quien también lo es, causan estragos en la misma aldea robando las almas de los aldeanos y controlando sus cuerpos.

Inuyasha pelea con Kagura, quien utiliza su viento para reanimar a los aldeanos fallecidos. Inuyasha decide usar el Kaze no Kizu, pero sorpresivamente se encuentra con que Kanna utiliza su espejo para reflejar y devolver su ataque, dejando a Inuyasha en un estado moribundo.

Inuyasha se enfrenta a Kikyo para preguntarle por qué le entregó a Naraku los fragmentos que le quitó a Kagome, y ella le explica que es parte de su plan para destruir a Naraku.

Sesshomaru encuentra el cadáver de Goshinki y detecta en él el olor de Inuyasha. Luego le lleva la cabeza del demonio a Kaijinbo, un ex discípulo del herrero Totosai, para que le forje una espada hecha con la cabeza de Goshinki.

Kaijinbo es destruido por su propia creación, la espada Tokijin, porque es demasiado maligna para ser portada por él. Kagura guía a Sesshomaru hacia Tokijin y observa cómo él reclama la espada y se apodera de ella antes que su hermano Inuyasha , quien escapa junto a sus amigos, después de casi haberse transformado de nuevo.

Inuyasha y Koga tienen que unir fuerzas a pesar de su enemistad para luchar contra Juromaru y Kageromaru, las nuevas creaciones de Naraku.

Kagome regresa a su época luego de una discusión con Inuyasha, celoso de que ella hubiera protegido a Koga nuevamente. Naraku encuentra a Kikyo pero se da cuenta de que es incapaz de matarla porque aún vive en él el corazón de Onigumo.

Luego de haber sido testigo de cómo Inuyasha y Kikyo se abrazaban cuando ella huyó de Naraku, Kagome se ve muy afectada y decide regresar a su época, luego de dejarles algunas medicinas a Sango y Miroku.

Sango encuentra a su hermano Kohaku cuando es perseguido por demonios que querían quitarle el fragmento que lo mantiene con vida, pero descubre que él ha perdido la memoria y no recuerda quién es.

Kagome queda a solas con Kohaku en el bosque y es atacada por él cuando repentinamente obedece la orden de Naraku de asesinarla. Sango llega para salvarla, pero se encuentra con que Kohaku fue incapaz de matarla.

Un demonio polilla llamado Gatenmaru atrapa a Inuyasha y Miroku en un capullo venenoso con la intención de obtener a Tessaiga.

Inuyasha se transforma en un demonio completo, lo cual le da un gran poder pero implica que pierda el control sobre sí mismo y sea capaz de matar indiscriminadamente sin distinguir a amigos y enemigos, y es lo que Sesshomaru descubre cuando llega al lugar para evaluar el poder de su hermano.

Para incrementar sus poderes, Inuyasha se dirige al lugar donde su padre selló a un enemigo, Ryukotsusei, el espíritu dragón. Totosai y Myoga le dicen que no lo despierte, porque a su padre le costó mucho trabajo vencerlo y lo mismo sucederá con él; simplemente tiene que atravesar su corazón con su espada, pero Inuyasha se rehúsa y quiere luchar con él.

Inuyasha se enfrenta a Ryukotsusei, pero tras perder brevemente su espada se transforma, sin embargo logra recuperar su habilidad para empuñar a Tessaiga y consigue dominar también una nueva técnica: Bakuryuuha (conocida como Onda Explosiva) y vence a Ryukotsusei.

Inuyasha, Sango, Miroku, Shippo y Kagome llegan a una aldea, y Miroku se encarga de eliminar a un demonio de una vivienda. Shippo encuentra a una niña que está siendo maltratada por otros niños, y los ahuyenta. Más tarde descubre que la culpa era de ella, porque había robado alimentos que no le pertenecían.

Miroku y Sango se marchan para intentar derrotar a un hermoso demonio con forma de mujer que se dedica a atraer a los hombres de la aldea para robarles su juventud.

Mientras Sango se va para reparar su Hiraikotsu, el resto del grupo tiene un desafortunado encuentro con Tokajin, un hombre que alimenta a un árbol demoníaco con cuerpos humanos luego de haberle dado un fragmento de Shikon.

Mientras Kagome, Miroku y Shippo son encogidos y atrapados por Tokajin, Inuyasha es incapaz de luchar porque es noche de luna nueva. Kagome recupera su tamaño normal y colabora con Inuyasha, quien fue a buscarla, para intentar que todos puedan escapar con vida de Tokajin.

Sango se encuentra en su aldea natal, la aldea de los exterminadores. Mientras repara su Hiraikotsu con técnicas aprendidas de su padre, es atacada por dos niñas. Más tarde se entera que provienen de una aldea ninja y que desean ser sus aprendices para poder defender su aldea de monstruos que la acechan.

Naraku le ofrece un fragmento de Shikon a Tsubaki, una oscura sacerdotisa enemiga de Kikyo, a cambio de que maldiga a Kagome y la utilice para que mate a Inuyasha.

Kagome sufre la maldición de Tsubaki, quien la manipula para que intente matar a Inuyasha, pero la sacerdotisa oscura es interrumpida por Kikyo, quien le advierte que no debe subestimar el poder de su reencarnación y le dice que la matará si se atreve a lastimar a Inuyasha.

Kagome lucha por deshacerse de la maldición de Tsubaki, quien la manipula para que sueñe con episodios de su vida como si nunca hubiera viajado a la Época Feudal y conocido a Inuyasha.

Tsubaki huye con el fragmento de Shikon y regresa al templo donde se entrenó como sacerdotisa. Allí se encuentra con Momiji y Botan, dos jóvenes sacerdotisas, a quienes hace creer que Inuyasha y su grupo son enemigos.

Mientras Miroku y shippo intentan convencer a Momiji y Botan de que no son enemigos, Tsubaki libera a un demonio de una pagoda para intentar derrotar a Kagome e Inuyasha.

En un rápido combate, el equipo derrota a un monstruo débil, siendo agasajados por el pueblo victimado por el monstruo, pero esa noche Sango se comporta de manera extraña y ataca a Miroku, lo cual despierta sospechas.

La barrera de Naraku misteriosamente se debilita, lo cual permite a Koga e Inuyasha detectar su olor. Mientras tanto, Kagura, luego de obtener los fragmentos de Koga, debe decidir si traicionar o no a su creador Naraku.

Kagura descubre que Inuyasha se transforma en humano en las noches de luna nueva, pero decide no contárselo a Naraku, quien al mismo tiempo está experimentando una espantosa transformación en su cuerpo.

Shippo recibe una carta de desafío, enviada por Soten, el último de los hermanos Relámpago, así que él y sus amigos se dirigen al lugar de encuentro, pero Soten ideó un plan para capturar a Shippo y evitar que sus amigos lo ayuden, tendiéndoles una trampa a cada uno de ellos.

Durante la ausencia de Kagome, quien todavía no había vuelto de su época, Inuyasha y el resto encuentran que un numeroso grupo de bandidos fueron asesinados en una aldea. Pero lo extraño no es que estén muertos, sino que les falta el rostro.

Inuyasha salva a Kagome del monstruo creado por Naraku, llamado Musso; al parecer, lo que más desea éste es quedarse con Kagome. Todos, incluso Inuyasha, concuerdan en que es mejor que Kagome se aleje de allí y vuelva a su época hasta que se resuelva el asunto.

Inuyasha se enfrenta a Musso, pero la batalla se torna interminable ya que el cuerpo de ese monstruo es capaz de regenerarse, y ni el Kaze no Kizu funciona. Miroku se da cuenta de que el corazón de Onigumo se encuentra en la espalda de Musso, en la cicatriz en forma de araña, y le dice a Inuyasha que si logra direccionar el Kaze no Kizu a esa parte de su cuerpo lo derrotará.

Inuyasha va a visitar a Totosai para que le enseñe una técnica capaz de destruir el campo de energía de Naraku. Allí se encuentra con un pequeño gato montañés algo torpe que busca lo mismo que él, quiere aprender a destruir campos de energía ya que un monstruo creó uno alrededor de las montañas donde vive él y su gente y no pueden conseguir alimentos.

Myoga le cuenta a Inuyasha la técnica secreta que le dijo Totosai para romper el campo de fuerza de Naraku: tiene que derrotar a un hombre murciélago y bañar a Tessaiga con su sangre. Como los hombres murciélago se dedican a crear campos de energía, la espada se hará más fuerte, porque adoptará el poder del enemigo.

El ejército de hombres murciélago ataca la aldea en la que nació Shiori, e Inuyasha y sus amigos deben defenderla. Finalmente, se enfrenta al malvado abuelo de Shiori, Taigokumaru. Ella deberá elegir entre volver a la aldea, rompiendo el campo de energía con el que protege a su abuelo y haciendo que éste ataque a su madre, o quedarse con él manteniendo el campo y dejar que continúen atacando la aldea.

Kagome tarda mucho, entonces Inuyasha va a buscarla a su época. Mientras tanto, la aldea de Kaede es atacada por un grupo de gatos leopardo que buscan a Kagome para obtener la perla de Shikon. Cuando Inuyasha y Kagome regresan, los gatos vuelven a atacar y esta vez se llevan a Kagome.

Inuyasha logra destruir la barrera de los gatos-leopardo con la nueva técnica de Tessaiga. Luego de que Myoga les revele por qué esos demonios están buscando venganza, el grupo se divide para enfrentar a cada uno de ellos separadamente.

Para resucitar a su Maestro, los gatos-leopardo han capturado aldeas enteras para hacer sacrificios. Aun así, cuando el Maestro es vuelto a la vida, inesperadamente mata a tres de ellos. Inuyasha y Sesshomaru se unen para derrotarlo.

Inuyasha, Sango, Miroku, Shippo y Kagome se dirigen a una aldea para exterminar a un monstruo. Cuando llegan, el terrateniente dueño del castillo reconoce a Sango; se conocieron 6 años atrás cuando ella, su padre y el resto de sus compañeros exterminadores fueron allí a eliminar a un monstruo.

Jaken, sin que Sesshomaru sepa nada, idea un plan para robar a Tessaiga. Primero, contrata a una criatura torpe para que la robe, pero esta se confunde y se lleva diferentes pertenencias de Sango, Miroku y Kagome, que a Jaken no le interesan.

Naraku amenaza a Sesshomaru con lastimar a Rin a menos que él mate a Inuyasha, pero Sesshomaru ignora éste ultimátum. Inuyasha pelea con Kagura, que sólo está fingiendo luchar por Naraku, a quien ella quiere que Inuyasha mate.

Naraku se ve obligado a pelear con Sesshomaru e Inuyasha, quienes unen fuerzas para intentar herirlo seriamente. La lucha se detiene cuando Naraku, antes de desvanecerse, le ordena a Kohaku que mate a Rin, lo cual obliga a Sesshomaru a abandonar la pelea y acudir en su ayuda.

Mientras Inuyasha, Miroku y Sango investigan un castillo abandonado sin obtener pistas, Kagome debe estudiar para su próximo examen en su época. Inuyasha se impacienta por su ausencia y se dirige a la época actual para traerla de regreso.

Mientras Koga se encuentra en busca del castillo de Naraku, aparece una demonio-lobo llamada Ayame, que le reclama por una promesa de matrimonio que había hecho cuando ella era niña. Koga no recuerda nada de eso y está enamorado de Kagome, por eso se quiere deshacer de esa niña insoportable.

Mientras Koga se lleva a Kagome y tratan de escapar del monstruo de Naraku, aparece nuevamente Ayame y le vuelve a reclamar a Koga que se case con ella, así, según le dijo su abuelo, se unificarían los clanes y podrían salvar a su tribu de una presencia maligna que la amenaza.

Mientras Inuyasha y los demás siguen su camino en busca del nuevo escondite de Naraku, hallan a una anciana tratando de eliminar sin mucho éxito a una comadreja demonio. Inuyasha se hace cargo de destruirla, y más tarde la anciana les cuenta que la región está infestada de energía maligna debido a un lugar maldito en el que se exterminó a un ogro en el pasado.

La princesa del palacio conduce a Miroku al lugar donde habían enterrado la cabeza del ogro, pero como tarda mucho, Sango va a ver qué ocurre: el ogro había adoptado la forma de la princesa y ataca a Miroku, quien no se puede mover.

Kikyo encuentra a un anciano que intenta robarle, pero de repente se derrumba debido a un dolor en el pecho. Él le cuenta su trágica historia, que era un mal hombre en su juventud y responsable de las lesiones de Onigumo, y ahora busca la redención, aunque cree que nunca la encontrará.

Inuyasha y sus amigos llegan a una aldea, los aldeanos creen que Inuyasha es el Dios Bestia y lo veneran. Le dan poco alimento y justifican esto diciendo que sus campos son atacados y es lo único que queda.

Kagome coge un fuerte resfriado y no pueden seguir el viaje así, por lo que Inuyasha se enoja. Sango y Miroku le recomiendan que regrese a su época ya que podrá curarse más rápidamente. Inuyasha la va a visitar y le prepara una medicina con ingredientes extraños, pero efectiva.

Inuyasha sigue en la época de Kagome, y van de compras juntos para llevarse cosas antes de volver a la época feudal. Pasan por una tienda de flores y ven a Sota, quien al parecer está enamorado de una niña llamada Gitomi y le pide consejos a Inuyasha.

Shippo descubre a una niña llamada Koume llevándose a Kirara, a quien confundió con su gato de dos colas llamado Kuroro, el cual había sido echado de la aldea cuando un adivino le explicó a Koume y al pueblo el verdadero motivo de la mala suerte que había caído sobre la aldea; la gata.

Inuyasha y su grupo deben derrotar a Kawamaru, un general resucitado por Urasue, que utiliza a Enju, una alfarero también resucitada por ella, para crear ejércitos demoníacos de arcilla.

Inuyasha, Kagome, Shippo, Sango y Miroku buscan un lugar para quedarse, pero tras visitar varias aldeas y ver que no son bien recibidos, especialmente Miroku, le preguntan a éste qué es lo que hizo. Los aldeanos lo acusan de haberlos engañado vendiéndoles pergaminos falsos para proteger sus hogares de espíritus malignos y de cortejar a las mujeres (quienes no parecen nada molestas por ello, al contrario).

En compañía de Izumo, un joven erudito, el grupo de Inuyasha debe derrotar a un conjunto de demonios que poseen fragmentos de Shikon falsos.

Kagome descubre un alarmante secreto sobre Izumo, quien tiene la intención de usar los poderes espirituales de Kagome y las almas de sus amigos para crear una verdadera esfera de Shikon.

Después de ser picado por dos de los insectos venenosos de Naraku, Jaken está a punto de morir envenenado, pero existe una planta medicinal capaz de curarle: la planta milenaria, y Rin no duda en ir a buscar esa planta para salvar la vida de Jaken.

Cuando Kirara desaparece misteriosamente una noche, Shippo se dedica a intentar descubrir por qué se fue y quién tuvo la culpa, sin importar lo desagradable que pueda ser para sus amigos tener que oírlo. Tras creer que un demonio la mató, todos quedan tristes.

Tras una pelea con Inuyasha, Kagome se interna en un bosque. Tras encontrar una cueva, entra y allí encuentra a Kikyo. Ambas quedan atrapadas en la cueva que devora la energía espiritual de las sacerdotisas, por lo que sólo uniendo fuerzas y usando los conocimientos y experiencia de Kikyo junto con el potencial de Kagome serán capaces de escapar.

Koga se aparece al grupo de Inuyasha y Kagome le regala una bolsa de papas, por esta razón Inuyasha y Koga arman una pelea. Luego Ginta y Hakkaku, los compañeros de Koga, se encuentran con Jaken y, después de oír sobre su poderoso amo, intentan evitar sin mucho éxito que Koga y Sesshomaru se encuentren.

Garamaru, el hermano del demonio-polilla Gatenmaru, aparece para vengarse de Inuyasha atrapando a sus amigos en capullos que los transformarán en demonios-polilla a medida que sean acosados por sus peores miedos.

Miroku recuerda haber sido salvado en su juventud por una hermosa mujer llamada Koyuki durante una ventisca. La historia se repite cuando Koyuki regresa y se lleva a Miroku, haciendo que Sango y el resto del grupo acudan en su rescate.

Kohaku usa uno de los siete fragmentos de la Perla de Shikon para resucitar al gigante Kyokotsu, el primero de los Siete Guerreros, que ataca a la tribu de los lobos.

Kyokotsu era sólo el primero de siete poderosos guerreros resucitados que persiguen a Inuyasha y a los otros, se ve como Inuyasha debe enfrentar a Jakotsu, el segundo de los Siete Guerreros, y su poderosa espada serpiente, una espada sin poderes mágicos, pero de un increíble poder.

Mukotsu, el experto en venenos y tercero de los Siete Guerreros, hace su aparición secuestrando a Kagome, mientras Inuyasha debe enfrentar a Jakotsu en un segundo encuentro.

Kagome, Sango y Miroku han caído víctimas del poderoso veneno de Mukotsu obligando a Inuyasha, Shippo y Kirara a huir para protegerlos de los guerreros, mientras Jakotsu se reúne con Renkotsu.

Huyendo de Ginkotsu, Shippo y Kirara se resguardan en un templo que ha sido atacado, dejando por único sobreviviente a un monje, quien resultaría ser Renkotsu tendiéndoles una trampa.

Kagome y los otros han dejado de respirar, a pesar de que Inuyasha salvo a sus amigos de los Guerreros, el veneno parece haber terminado su cometido, dejando a Shippo muy triste y obligando a Inuyasha a mostrar sus verdaderos sentimientos por Kagome y sus amigos, haciendo que esté a punto de llorar.

El hombre que ha encontrado Kikyo genera desconcierto entre ella y los otros, después de todo porque habría Naraku de haber revivido a un generoso y amable médico, quien parece tener un corazón más puro que cualquiera, siendo esto reflejado por su fragmento de la perla de Shikon.

El médico misterioso resulta ser Suikotsu, el sexto de los Siete guerreros, quien parece tener tanto una personalidad buena como una mala, éste y los otros deciden atacar a Inuyasha, Kikyo y los demás, con ayuda del reconstruido Ginkotsu en su nueva forma.

No habiendo encontrado nada en el misterioso monte, Inuyasha y los otros deciden ir detrás de los guerreros, sin saberlo, estos finalmente se han reunido con su líder, el último y más poderoso de los Siete Guerreros, Bankotsu, quien ha planeado su venganza contra aquellos que les quitaron la vida.

Inuyasha ha aparecido justo a tiempo para salvar a Koga de los poderosos ataques de Bankotsu, quien a pesar de ser humano parece tener un poder superior a cualquiera, una batalla inicia dándole un rival a cada uno de los héroes.

Habiendo descubierto que el Monte de las Animas tiene una relación con Naraku, Inuyasha y los otros deciden buscar respuestas en la isla donde reposa el Santo que bendijo dicho Monte.

La batalla entre Inuyasha y Bankotsu continua, Inuyasha puede usar sus poderes nuevamente, El Santo Hakushin ha desaparecido y el campo pareciera estar a favor de Bankotsu, y la presencia de un artefacto misterioso que perteneció al santo Hakushin ha levantado sospechas del bando al que pertenece éste, cual es la relación que tiene éste Santo con Naraku y los guerreros.

Bankotsu, a punto de ser derrotado, ha logrado escapar con la ayuda del misterioso santo, Miroku y Sango han decidido internarse en el Monte de las Animas y luego Koga ha decidido tratar de entrar en el campo sagrado, no viendo que el campo oculta a Ginkotsu y Renkotsu, quienes los esperan para derrotarle.

Sesshomaru se ha adentrado en el monte, encontrando a Jakotsu quien lo espera para atacarle, mientras Suikotsu decide ir tras Rin y Jaken para obligar a Sesshomaru a seguir sus órdenes.

El doctor Suikotsu también parece haber empezado a contaminarse con la oscuridad del fragmento, dando como resultado que él y el asesino compartan finalmente una sola mente, sin embargo parece ser que su verdadero ser sigue en su interior y Kikyo decide luchar para salvar esa luz que parece estarse apagando.

Renkotsu, luego de la derrota de Ginkotsu, ha decidido cobrar venganza, para esto decide alejar a Inuyasha del herido Koga y de esta manera usar todas sus técnicas para destruirle, quedando éste con la única protección de Kagome, esta sin embargo decide hacer su máximo esfuerzo para protegerle sin saber que Renkotsu ha decidido atraparlos en un río de fuego, afortunadamente Inuyasha llega para salvarles del peligro, dándole su traje de rata de fuego a Kagome.

Miroku y Sango siguen su travesía a través del misterioso y enorme monte, pero Kohaku en secreto se encarga de alejarles del camino. Pero sin saberlo, al acercarse, Kanna y Kagura les esperan para darles la bienvenida.

Inuyasha se ha cansado de esperar y ha decidido entrar al Monte de las Animas, encontrando a Renkotsu, quien lo espera. Sango y Miroku han logrado escapar de Kagura quien se ha visto impedida de perseguirlos debido a la barrera sagrada, en la parte más alta del Monte, han encontrado finalmente al santo Hakushin, quien les cuenta su historia y por que ayuda a Naraku.

Jakotsu, habiendo encontrado a Inuyasha convertido en humano, decide iniciar una batalla injusta, mientras tanto Miroku y Sango continúan su batalla contra el poderoso santo Hakushin, logrando que éste perdiera su poder sobre el campo sagrado, provocando que pierda gran parte de su poder.

Bankotsu, el único sobreviviente de los Siete Guerreros, decide vengar la muerte de todos sus camaradas (incluyendo a Renkotsu), la batalla final entre Inuyasha y Bankotsu da inicio, mientras tanto Sesshomaru, Koga y los otros finalmente logran entrar en el interior del monte.

Inuyasha y Bankotsu siguen con su batalla, éste le cuenta a Inuyasha de la ofrenda que le hizo a su arma, y termina logrando el tributo final de 2000 víctimas, logrando poderes que Inuyasha compara con los de la Tokijin de Sesshomaru

Naraku ha aparecido finalmente, capturando a todos con partes del monte que han cobrado vida, ya que éste resultara ser actualmente el cuerpo de Naraku, éste despoja a Bankotsu de sus fragmentos restantes revirtiendo al último de los guerreros a huesos, luego de despojar los fragmentos que éste le había arrebatado a Bankotsu, Naraku muestra su nueva apariencia.

Habiendo rescatado a Koga de ser absorbido por Naraku y de ser sepultado bajo el monte, Inuyasha y los otros deciden perseguir a Naraku, quien se ha encontrado con Kikyo, revelándole que su verdadero objetivo con su nuevo cuerpo es sólo uno, tener la facultad de poder matarle, llegando Sesshomaru para presenciar los últimos momentos de Kikyo.

Un viejo monje le ha dicho a Inuyasha que vio a una sacerdotisa muy herida, y él asume que es Kikyo y va en busca de ella. Mientras tanto, Kagome y los demás son capturados por unos hombres que los llevan a su aldea.

Kagome, aún siendo manipulada por el niño, debe superar su odio y resentimiento hacia Kikyo. Inuyasha llega justo después de que Kagome asume que ella ama demasiado a Inuyasha como para odiarlo por amar a Kikyo.

Kagome lleva un poco de comida seca a su época, la cual obtuvo como un regalo en su último viaje, lo que no sabe es que el contacto de la comida con el fuego o agua hirviendo tendrá como resultado la aparición de un demonio nuevo.

Kagome ahora está en el Festival cultural de su escuela y por presiones de sus tres amigas, Kagome protagonizará cada una de las actividades que ellas decidan, mientras tanto su familia, junto con Inuyasha, van a verla para ver cada uno de sus papeles estelares, sin embargo los monstruos de la comida seca siguen en la escuela sin que nadie lo note.

Un joven va a pedir ayuda a la aldea de la anciana Kaede ya que un demonio que se mantenía sellado en su aldea ha escapado, por suerte Inuyasha y sus amigos van a ayudarlo. Al parecer el demonio Chokyukai rapta a mujeres jóvenes y bellas, así que deciden utilizar a Kagome de señuelo.

Shippo se ve en varios problemas al tratar de convencer a cinco zorritos que él es el gran zorro mágico que acompaña y salva a Inuyasha, Kagome, Sango y el monje Miroku.

Inuyasha y sus amigos se dirigen a una aldea habitada sólo por mujeres que al parecer son poseídas por un demonio que se come la piel de los hombres, ese lugar es llamado "La aldea de las mujeres ogro".

Sango se encuentra bajo el poder del demonio salamandra que habitaba en el pergamino de la diosa Kannon, cuando Inuyasha logra derrotar al demonio y Miroku descubre como expulsar el ente maligno de las jóvenes de la aldea (pone un pergamino en su estómago y después les pega), éste se percata de que no está Sango, así que va a su rescate.

Una mujer llamada Sara reúne todas sus fuerzas antes de morir y así es como consigue tener un aura maligna y poder presentarse ante Sesshomaru. Sara busca cumplirle todos sus deseos como prueba de sus sentimientos, así que va en busca de la espada de Inuyasha, Tessaiga.

Al toparse con un lugar familiar, Sesshomaru recuerda lo que paso en ese entonces; Inuyasha apenas se había apoderado de Tessaiga cuando él se encontraba débil y sin el brazo izquierdo, empezó a eliminar a los soldados que pretendían aniquilar el castillo de Sara.

Al parecer están desapareciendo varios de los mejores y más famosos monjes de la región, Miroku se entera por medio de Hachi (un mapache) de que su maestro Mushin puede morir de alguna enfermedad, así que va a visitarlo.

Inuyasha y el grupo se han quedado sin dinero, así que van a una de las aldeas cercanas, para su sorpresa se encuentran con la anciana que los había ayudado contra la cabeza de ogro que andaba en un castillo hace tiempo.

Inuyasha y sus amigos se encuentran de nuevo con Akitoki, el antepasado de Hojo, quien busca purificar un arma que está maldita y que ha pasado por generaciones en su familia, ahora todos tendrán que ayudarlo con su cometido.

Los cuatro ninjas monstruo no dejan pasar a los demás a rescatar a Kagome,pero estos son vencidos y absorbidos por el agujero negro de Miroku.

Hoshiomi ahora tiene la alabarda que lo hace un demonio más fuerte, pero sus constantes recuerdos sobre haber amado a una humana lo persiguen, y compara la relación de Inuyasha y Kagome. Kagome por un momento es poseída por Tsukiyomi (la mujer que amaba Hoshiomi), y esta le dice que lo encerró y dividió la alabarda porque esta era muy fuerte y lo estaba controlando como ahora.

Kagura llega hasta uno de los últimos sacerdotes que cree le pueden decir al bebé de Naraku donde están los límites de éste mundo con el otro.

Una de las mitades del bebé que conserva Kagura se ha hecho un niño, llamado Hakudoshi, y se ha hecho dueño de Entei, derrotando al demonio come humanos que lo montaba, éste se encuentra con Inuyasha y sus amigos y les da la valiosa pista de donde se encuentra el último fragmento de la perla.

Shippo y Kagome son atacados por un demonio sin cabeza, pero Inuyasha llega a su rescate, Shippo se encuentra con un demonio nutria pequeño llamado Kanta, que busca el cuerpo de su padre. Kanta les dice a Inuyasha y los demás que al parecer muchos demonios y ogros han sido decapitados por un niño albino montado en un caballo con llamas, inmediatamente saben que se trata de Hakudoshi.

Inuyasha recuerda que la perla que lo guio a la tumba de su padre para obtener a Tessaiga aún se encuentra en su ojo derecho, así que va con el anciano Myoga para que le diga más detalles, sin embargo esta ya no le sirve y tienen que optar por otra opción, al parecer Hosenki hace perlas que representan cada una de las tumbas de los demonios.

Inuyasha y sus amigos son guiados a las puertas del portal por los insectos de Naraku, al encontrarse finalmente con la entrada, dos guardianes le preguntan a si quiere entrar, pero al no hacerle caso a Myoga éste responde que si, por lo que un combate difícil para Inuyasha se desata.

Naraku decide ayudar a la princesa Abi, la cual es conocida por adiestrar a unas aves chupa sangre y salvar a su madre con tal de que le muestre el camino entre los límites de los dos mundos.

Una sacerdotisa muy poderosa ve un gran potencial en Kikyo y le lanza una maldición si es que se enamora.

Para ese entonces Kikyo ya cuidaba de Onigumo, pero nunca le dijo a Inuyasha ya que éste podía estar celoso; Kikyo ya era acompañada por Inuyasha para los trabajos que tenía que hacer al derrotar demonios, pero en ese entonces Onigumo ofreció su alma por un nuevo cuerpo.

Inuyasha se encuentra de nuevo con las aves que chupan la sangre de los humanos, al intentar atacarles aparece Hakudoshi y Kagura para detenerlos, al parecer los aldeanos buscan a un sacerdote que ayuda a exterminar monstruos.

Al parecer el gran sacerdote que ayuda a los aldeanos no es más que Kikyo que ahora es acompañada por dos niñas, sin embargo no están del todo seguros, así que lo siguen.

Las pequeñas niñas que acompañaban a Kikyo guían a Kagome hasta su cuerpo, donde le dicen que ella es la única que puede salvar a la sacerdotisa, y para hacerlo tendría que sellar las heridas en su cuerpo con las cenizas y tierra de su tumba, mientras Kagome lo hacía, vio algunos recuerdos de cuando Naraku la engaño para matar a Inuyasha.

Kohaku ahora protege al bebé que se encuentra en el castillo, el cual es el corazón de Onigumo. La princesa Abi decide atacar el castillo ya que desde que conoce a Naraku se ha visto envuelta en conflictos entre híbridos.

Kohaku al fin ha recordado que fue lo que paso en su pasado, por lo que jura venganza contra Naraku, mientras tanto Kagura se da cuenta de que el bebé es el corazón de Naraku y que por eso lo protege.

Kikyo le entrega a Inuyasha una flecha para Kagome, que ella deberá decidir cuándo usar.

Inuyasha y sus amigos persiguen a Naraku hacia el otro mundo, y llegan a la tumba del padre de Inuyasha.

Sesshomaru, quien había llegado demasiado tarde para utilizar el río de sangre de Tekkei, usa un método alternativo que le provee Kagura para llegar al otro mundo, el ya mencionado portón de la tierra del fuego.

Mientras Sesshomaru y Naraku luchan, Hosenki (quien ha vuelto a ser puro) desafía a Inuyasha a derrotarlo para fortalecer a Tessaiga y obtener el poder necesario para enfrentar a Naraku.

Hakudoshi roba un altar portátil, con la ayuda de Kohaku, del que salen varias ratas que destruyen lo que esté a su paso. Kikyo forma un hechizo especial para detenerlas, pero Hakudoshi lo deshace tiempo después.

Miroku ha destruido el nicho o altar que mantiene a las ratas monstruo sueltas, Sango ve allí a Kohaku y piensa que el causo lo de las ratas y su propósito es matarlo, pero al ver como las ratas lo alcanzaron decidió protegerlo.

Las amigas de Kagome por fin conocen a su novio Inuyasha, pues regresó al presente para buscar a Kagome, pero también rompe su bicicleta.

Sango está muy molesta con el monje Miroku por haberse comprometido con ella y no cumplir, aun cuando no sabe la verdad.

Los niños de las aldeas han estado desapareciendo, cuando el monje Miroku y los demás van a ofrecer sus servicios, el jefe de la aldea les dice que ha contratado a otros monjes que se dedican a eso.

Inuyasha y sus amigos están cerca de la casa de Sango, y Kirara ha salido a ver los alrededores, de pronto unos demonios la molestan pero Kohaku llega y la rescata.

Naraku le roba a un demonio montaña llamado Gakusaijin el Fuyouseki, que es capaz de ocultar las auras demoníacas para que no sean percibidas, lo cual le permite esconderse.

Gakusaijin le entrega a Miroku cristales con su aura para poder encontrar a su robada Fuyouseki y de esta manera también a Naraku.

Un misterioso hombre llamado Goryomaru tiene un grupo de niños guerreros que se enfrentan a demonios y se llevan sus cadáveres, hecho que Inuyasha y sus amigos investigan con la esperanza de descubrir algo sobre el Fuyouseki.

Naraku atrae a Inuyasha y su grupo hacia el estómago de un gran demonio de piedra. Los atrapa allí con la intención de quitarles los fragmentos de Shikon luego de que todos mueran disueltos por la digestión del demonio.

Naraku se encuentra escondido junto con Kanna en una especie de templo; por otro lado Kagura observa como Goryumaru, encerrado por el mismo Naraku, absorbe demonios para asimilarlos. Mientras, en la era actual Aome realiza un examen hasta que es interrumpida por InuYasha, partiendo después como siempre a la era feudal sólo para ser atacados por Hakudōshi, quien mejora a Moryorumaru para que proteja a su hermano Akago con el propósito de destruir a Naraku.

Sesshōmaru se enfrenta con el nuevo Moryomaru (pero en el combate, la espada Tōkijin de Sesshomaru se rompe) mientras Kagura es envenenada por el shouki (veneno) de Naraku. Ya moribunda, meditando la soledad de su libertad, se le aparece Sesshomaru, el cual la contempla y habla con ella hasta su muerte. Tras la muerte de Kagura, el grupo de InuYasha llega para encarar a Sesshomaru por estar ahí, pero él sólo responde que Kagura murió sonriendo.

Sesshōmaru se encuentra con Totosai y éste le dice que su corazón ya ha madurado a causa de la muerte de Kagura y que Tenseiga ya está lista para ser un arma, enseñando un nuevo ataque llamado "Luna infernal" ("Meidou Zangetsuha"), que lleva directamente al oponente al inframundo. Después, Shippō se envuelve en una aventura al saber que tiene que enfrentar una prueba para medir su magia de Zorro.

"Ryurin no Tessaiga" es la nueva forma de Tessaiga, con escamas de dragón, que permite absorber energía y destruir el shouki. Tessaiga adquiere esta técnica al romper la espada-demonio Dakki, la cual podía absorber energía youkai. Esta técnica es muy útil, ya que puede absorber las habilidades de un monstruo; pero InuYasha no es capaz de controlar la energía que almacena la espada y acaba herido por esta.

Moryomaru decide absorber a Ginka y Kinka, dos hermanos los cuales son siameses y según la leyenda uno deberá destruir al otro para ser libre, cuya sangre le daría una gran unión a su caparazón. InuYasha busca a Totosai para que le diga como manejar la "Ryuurin no Tessaiga", y éste le dice que vaya a donde Yorei Taipei, el cual finge con su apariencia haciendo creer que sus vísceras habían sido absorbidas.

Naraku ha absorbido a Yomeiji, un árbol que con sus ramas es capaz de atravesar cualquier campo creado por un youkai, y ahora Naraku va tras Moryomaru para absorberlo. Luego de que creerse que Naraku había sido absorbido por Moryomaru, Naraku atraviesa el campo de Akago y lo absorbe al igual que a Moryomaru.

Kikyō ha purificado el miasma de Miroku y ahora Naraku le tiende una trampa para contaminarla con sus telarañas, ya que ha regresado a su cuerpo el corazón humano que desecho en el monte Hakurei. Mientras que, Aome tiene que sopesar la prueba, del espíritu guardián del monte, a su corazón en la cual, para conseguir el arco que Kikyo le dijo, tiene que superar el odio que le tiene a esta.

Naraku se ha llevado a Kikyo en sus telarañas con los demás. InuYasha encuentra a Aome y van por los demás. Naraku atraviesa con sus extremidades mortalmente a Kikyo. A la perla se adhieren los dos fragmentos purificados de Koga. Luego, es purificada por Kikyo y la flecha de Aome, después Naraku la contamina nuevamente quedando en el centro de esta una luz blanca.

Naraku se ha llevado a Kikyo en sus telarañas con los demás. InuYasha encuentra a Aome y van por los demás. Naraku atraviesa con sus extremidades mortalmente a Kikyo. A la perla se adhieren los dos fragmentos purificados de Koga. Luego, es purificada por Kikyo y la flecha de Aome, después Naraku la contamina nuevamente quedando en el centro de esta una luz blanca.

Naraku se da cuenta que el haz de luz que Kikyo ha dejado en el centro de la Shikon no Tama amenaza su vida. El grupo de InuYasha encuentra una aldea donde todos los aldeanos son muy amables y hay un olor muy agradable, aunque muy molesto para Shippo y Kirara. InuYasha no puede dormir por temer soñar con Kikyo y pronto se da cuenta que los aldeanos estaban siendo manejados por Kaou, el príncipe de las flores, el cual se aprovecha del dolor de las almas que captura.

El grupo de InuYasha se ha refugiado en una cueva para pensar en como atacar al youkai del espejo de Kanna. Mientras eso, son descubiertos e InuYasha es atacado por este youkai. Después del ataque, InuYasha se convierte en un youkai completo y puede controlar su cuerpo y mente, ya que Tessaiga fue quien le pidió su youki después de que éste haya sido absorbido por el youkai del espejo.

Miroku y Sango se enfrentan a una mujer youkai y su padre, los cuales tienen la capacidad de absorber los huesos de cualquier ser vivo. Miroku ha sido afectado por el veneno de ellos y Sango escoge como única salida aplicarle un poderoso veneno a su Hiraikotsu y lanzárselo al padre de la mujer youkai, para que éste se disuelva.

Aparece ante Sesshōmaru un joven diciéndole que sabe qué le falta a Tenseiga, a pesar de eso todo resulta una trampa porque aquel niño en realidad era Shishinki, un enemigo del Inu no Taishō, al cual éste le había robado el Meidou Zangetsuha. Sesshomaru se entera de que la Tenseiga en realidad es la parte que sobra de la Tessaiga.

Sesshōmaru se da cuenta de las verdaderas intenciones de su padre al dejarle a Tenseiga, por lo tanto va a donde Tōtōsai a pedirle explicaciones y éste le dice que el objetivo del amo era que el Meidou Zangetsuha que él había entrenado terminara en manos de la Tessaiga de InuYasha, cosa que no le agrada a Sesshomaru y explica las palabras de Shishinki.

Sesshōmaru recibe de Byakuya un fragmento del espejo de Kanna, el cual decide esparcir en Tenseiga e ir a retar a InuYasha con el fin de no cumplir con la voluntad de su padre; que era que el Meidou Zangetsuha que él había entrenado terminara en manos de la Tessaiga de InuYasha.

Naraku toma control del cuerpo de Hitomiko, una sacerdotisa muerta, a través de sus telarañas y logra atraer al grupo de InuYasha, especialmente a Aome, a la cual es arrastrada al recinto donde está Hitomiko después de tirar una de sus flechas a un cascabel de hitomiko que en realidad era una trampa para capturarla, la cual formó una barrera espiral que impide el paso de los demás.

Magatsuhi, la maldad que reside en la Shikon no Tama, toma parte del cuerpo de Naraku para ir por el fragmento de Kohaku. Sesshōmaru, quien protege a Kohaku, se enfrenta ante Magatsuhi, aunque al no tener un arma con la cual atacarlo es herido gravemente y Magatsuhi infecta de maldad el fragmento de Kohaku.

Tōtōsai le entrega a Sesshōmaru la vaina de Bakusaiga, y éste decide dejar a Rin, Kohaku y Jaken en la aldea de la anciana Kaede, mientras él va tras Magatsuhi. Aome se da cuenta que Magatsuhi sello sus poderes espirituales, pero tiene que regresar a la época actual a presentar los exámenes para ingresar a la preparatoria, mientras que cuando llega a su mundo se encuentra con que su familia se fue de viaje.

Aome e InuYasha no han regresado a la era Sengoku todavía. Mientras, Aome decide comprar unos alimentos para prepararle a InuYasha, y éste está con el abuelo de ella. Cuando Aome llega, InuYasha destroza la cocina de la casa usando a Tessaiga, para destruir una cucaracha.

Kohaku expulsa a Magatsuhi de su cuerpo, y éste es derrotado parcialmente por Sesshōmaru. Sesshomaru regresa a donde Rin, al saber que esta y Miroku habían sido golpeados por el aura demoníaca de Magatsuhi. Naraku, que seguía escondido tras una barrera, captura a Aome y obliga a Kohaku a intercambiar su fragmento por la vida de ella. Kohaku esconde una de las flechas de Aome y acepta la propuesta de Naraku

Naraku usa la Shikon no Tama para hacer su transformación, lo cual lo convierte en una gran araña; mientras tanto, Aome se gradúa de secundaria y recibe la sorpresa de que fue aceptada en la preparatoria. Al regresar, Aome va junto a InuYasha, Miroku y Sango tras Naraku, quien emite una poderosa nube de jyaki capaz de atraerlos, dejando el grupo atrás a Shippo. Sesshomaru decide entrar al cuerpo de Naraku a rescatar a Rin, quien sigue poseída por Magatsuhi, dentro del cuerpo de Naraku; mientras, el grupo de InuYasha hace lo mismo.

Naraku les muestra a Miroku y a Sango una ilusión del momento en el que murió el padre de Miroku, y obliga a éste usar su Kazaana, la cual está por rasgarse, por lo que Miroku decide alejarse de Sango ya que podría absorberla. Imonio y lamenta el no haber podido salvar a Kikyo y a Aome, debilidad que aprovecha Naraku sometiéndolo bajo el poder de la Shikon no Tama.

Magatsuhi ha sido derrotado con la Tenseiga de Sesshomaru, así que los poderes espirituales de Aome han regresado y a su vez una luz purificadora vuelve a aparecer en la Shikon no Tama. Sin embargo, Naraku decide utilizar esta luz como una trampa para el grupo de InuYasha, convirtiéndola de esperanza a desesperación.

Sango es atacada por el shouki de Naraku, cayendo en las profundidades del cuerpo de él, a donde la sigue Miroku. En ese momento Sango le pide a Miroku que la absorba con él, desesperación que le da poder a la oscuridad en la Shikon no Tama; mediante lo cual Naraku la absorbe y se convierte en un demonio completo.

Finalmente todos están reunidos para derrotar a Naraku, Sesshomaru pide a Jaken que se vaya junto con Ah-Un, Rin, Kohaku y Shippo; Rin le devuelve el tapabocas a Sango y Kohaku da el suyo a Miroku; mientras tanto la pelea se desata en el interior de Naraku, pero éste es destruido por Bakusaiga y Tessaiga; Naraku intenta destruir la aldea donde se encuentra Kaede mandando masas de miasma; InuYasha y los otros deciden salir del interior de Naraku y luchar desde afuera.

Aome sigue dentro de la oscuridad y, atemorizada de quedar atrapada para siempre, empieza a dudar de ella misma. InuYasha, desesperado mientras los demonios siguen comentando que es el destino de Aome luchar dentro de la perla de Shikon, se enfurece y empieza a comentar que Aome no nació para luchar dentro de la perla, si no que nació para conocerlo.