Mientras Mr. Bean toma fotos de la naturaleza con su cámara, se enfada cuando la naturaleza se pone contestataria.

Bean descubre que, en el mundo del crimen organizado, un osito no siempre es un osito. A veces es un conejo.

Mr. Bean no encuentra lugar para estacionar. Así que se fabrica uno.

Mientras que la excavación de un tesoro enterrado, Mr Bean se cava un hoyo demasiado profundo para salir.

A Mr. Bean se le despierta el bichito de la pintura. Y también se despiertan varios bichitos más... y moscas y babosas y ratones.

Es el momento de la limpieza de primavera y la habitación del Sr. Bean es un desastre, así que él limpia todo. Después de esto, toma un baño, pero después de salir de la bañera, accidentalmente se desliza sobre el jabón y se estrella contra la aspiradora, lo que hace que explote y su habitación se ensucie nuevamente. Intenta bañarse de nuevo, excepto que no hay agua caliente. Intenta robarle algo a un vecino, pero el champú verde hace que se vuelva verde. Luego trata de escapar pero cae en el barro. Finalmente, Bean intenta bañarse en la bañera de la Sra. Wicket mientras está en la ciudad, pero coloca demasiado jabón en la máquina, lo que hace que explote y llene todo el edificio de apartamentos con burbujas de agua.

En el cumpleaños de Teddy, el Sr. Bean decide invitar a su novia Irma Gobb a la fiesta de cumpleaños de Teddy por la noche. Sin embargo, Irma se siente infeliz e incómoda en la fiesta debido al juego injusto de Bean. Cuando son las 9:00 pm, Bean le muestra a Irma la exhibición de fuegos artificiales y se siente mejor.

El juego de croquet de la Sra. Wicket es interrumpido por un topo molesto. Mr. Bean intenta deshacerse de él, pero sigue fallando hasta que finalmente logra capturarlo. La Sra. Wicket le ordena a Bean que lo mate con un martillo de croquet, pero Bean, teniendo piedad de no matarlo, lo pone en un frasco y lo libera en la naturaleza.

Mr. Bean trata de relajarse, pero las obras en el exterior están sacudiendo todo su apartamento. Después de numerosos intentos fallidos de demorar a los trabajadores, finalmente retrasa a los trabajadores ofreciéndoles comida, pero no se da cuenta de que hay vapor en una tubería rota. Cuando Bean enciende la vela en su carrito de comida para los trabajadores, a pesar de que los trabajadores le dijeron que no lo hiciera, la tubería explota y Bean termina en el hospital.

Mr. Bean intenta ver la televisión con Teddy, pero mientras trata de encontrar los resortes remotos que salen de su sofá, lo que lo lleva a comprar un nuevo sofá pero no puede pagar el costo de 300£. Él decide hacer un mercadillo, pero todas sus cosas se desvanecen mientras él está rescatando a Teddy de una niña. Finalmente, vende un sello por 300£ a un transeúnte y compra el sofá. Luego, Bean se da cuenta de que el control remoto de su TV todavía está dentro del viejo sofá y regresa a la tienda de antigüedades donde lo abandonó. La tienda ha arreglado el sofá y lo ha vendido (al conductor del Reliant). A medida que Bean persigue al conductor para recuperar el control remoto, se revela que el propietario de la tienda retiró el control remoto del sofá y lo vendió por 20£.

Al dejar un rompecabezas del ático de la Sra. Wicket sin terminar debido a una pieza faltante, el Sr. Bean se embarca en una detallada búsqueda del tesoro que comienza dentro de la chimenea de la Sra. Wicket y termina dentro de una pequeña choza en el parque. Al llegar a la choza, Bean encuentra una llave, corre a casa, abre la caja que contiene la última pieza del rompecabezas con la llave y resuelve con alegría el rompecabezas.

Después de que la Sra. Wicket lo echara debido a que la despertó accidentalmente mientras la traía de regreso a su apartamento después de su sonambulismo, el Sr. Bean busca un nuevo hogar. Él prueba algunos apartamentos que ve anunciados en el periódico, pero en vano. Cuando ve su propia habitación en alquiler, decide disfrazarse para volver a entrar. Cuando la Sra. Wicket camina de noche a su habitación sonambula, la lleva de vuelta a la habitación pero ella se despierta, entra en pánico y Bean se muestra finge que ataca al "hombre" y lo arroja por la ventana. La señora Wicket, pensando que Bean ha "sometido" al hombre, le da la bienvenida de nuevo.

Cuando la Sra. Wicket está enferma, esto inspira al Sr. Bean a fingir una lesión con la esperanza de que conseguir una estancia de lujo en el hospital. Desafortunadamente, no es así y la enfermera es diferente de lo que Bean imaginó. Cuando la enfermera revisa a Bean con la radiografía, se sorprende cuando la enfermera ve a su Teddy (que Bean lo oculta después de que se entera de que los osos de peluche están prohibidos dentro) en la cámara, pensando que se lo tragó todo. Bean intenta escapar junto a la silla de ruedas, pero la enfermera lo persigue hasta que accidentalmente cae en el ascensor roto, lo que resulta en una lesión seria y genuina y en una lujosa estancia como él deseaba.

Mr. Bean supone que Scrapper ha sido aplastado por el recolector en el camión de basura. Como no hay gatos que se parezcan a él, Mr. Bean va a un albergue de gatos y ve un gato que se parece a Scrapper. Él deja salir a los gatos como una distracción para el dueño, le roba a su gato y luego lo sustituye por Scrapper. Desafortunadamente, cuando la Sra. Wicket se sorprende al ver al gato falso, tira al Sr. Bean y ve a Scrapper vivo. Bean devuelve el gato del propietario, pero se ve atrapado y se ve obligado a arreglar el papel tapiz que adorna la casa del gato como castigo.

Bean quiere comprar una caja de cereales, pero la Sra. Wicket le ordena inesperadamente que compre comida para gatos para Scrapper. Mientras Bean está de compras, el carrito de compras defectuoso que usa se rompe accidentalmente, lo que hace que el gerente de la tienda lo aceche. Decide construirse un carro mecánico para completar sus recados, solo para comprar comida de perro en lugar de comida de gato para la Sra. Wicket, enfadandola.

Mr. Bean lleva a una urraca herida a su apartamento y pronto se da cuenta de que le gusta coleccionar cosas encantadoras y brillantes tomadas de las casas de los vecinos. Cuando la señora Wicket y el policía ven esto, Bean es arrestado por error por un gran robo. Cuando el policía regresa de su automóvil después de una multa de estacionamiento, cree que Bean se ha escapado, pero en realidad se esconde detrás de la puerta abierta y le muestra la urraca. Concluyendo que la urraca es responsable del robo, Bean finalmente es liberado. Sin embargo, cuando Bean regresa a su apartamento, encuentra que la corona de la reina es robada por la urraca, sorprendiéndolo.

Cuando la Sra. Wicket es hospitalizada después de romper accidentalmente su brazo, el Sr. Bean debe cuidar a Scrapper mientras ella está ausente. Desafortunadamente, esto no es fácil ya que se odian. Cuando todo se vuelve un desastre, la Sra. Wicket golpea a Bean cuando regresa del hospital y, como resultado, también lo envía al hospital.

El recién comprado barco dentro de una botella del Sr. Bean es recogida involuntariamente por el lechero, lo que hace que Bean se meta a escondidas dentro de la fábrica de leche para recuperar la botella. De vuelta en su apartamento, decide colgar su botella cerca de su puerta, pero despierta a la Sra. Wicket y cuando ella cierra la puerta después de callar a Bean, la botella se rompe. Afortunadamente, Bean está satisfecho cuando trae las piezas rotas del barco a su pez mascota.

El Sr. Bean quiere que Teddy haga trucos acuáticos, pero Teddy se vuelve muy apestoso después de que Bean accidentalmente arroje a Teddy a un cubo lleno de sardinas extremadamente apestosas, por lo que lo lleva a la lavandería. Esa noche, Bean ve un pez de colores en el estanque que está a punto de ser comido por Scrapper, pero se las arregla para rescatar al pez y lo cuida. Al día siguiente, Bean lo lleva a la playa hasta que un pez espada se come al pez dorado. Al aterrizar en un barco de pesca, Bean ve al pez dorado vivo pero se está apestoso y se ve obligado a ir a la lavandería para que lo limpien como a Teddy.

Cuando un inventor se muda al edificio de apartamentos, la Sra. Wicket transfiere al Sr. Bean arriba y le permite al inventor hacerse cargo de su apartamento. Después de algunos intentos fallidos de burlar al inventor, Bean ve su mejor invento y lo piratea para que no funcione correctamente mientras el inventor está abajo llamando a la señora Wicket. Cuando la Sra. Wicket ve su peor invento, echa al inventor y Bean regresa a su apartamento.

Después de que una tostadora defectuosa rompe accidentalmente la taza favorita del Sr. Bean con la cara de la Reina, va a la ciudad a comprar una nueva. Luego encuentra un camión que contiene tazas con la cara de la Reina, lo que lo lleva a perseguir el camión hasta el Palacio de Buckingham. Intentando conseguir una jarra; sin embargo, el perrito de la Reina roba a Teddy, lo que resulta en que Bean dé caza. Cuando mira a través de los agujeros para los ojos del retrato del perro de la Reina, Bean logra devolver al perro perdido a la Reina y es recompensado con una nueva taza, para su gratitud.

Cuando Mr. Bean roba una rebanada de pastel de chocolate de la Sra. Wicket, se ve obligado a esconderse dentro de su ático donde encuentra artículos de su infancia. Sintiéndose culpable por arruinar la boda de la Sra. Wicket montando su juguete Mini por la carretera cuando era más joven, trata de devolver la rebanada de pastel para compensarlo, pero termina siendo atrapado por ella.

Mr. Bean adopta un extraño y peludo animal rosa. Al descubrir que se trata de un joven tejón, Bean se da cuenta de que es parte del intento del dúo de ladrones de vender a los bebés pintándolos de rosa para ganar dinero. Cuando Bean ve lo que está sucediendo, decide sabotear su plan y lo logra al soltar el freno de emergencia de su camioneta y estrellarlo contra un auto de la policía, arrestando al dúo nuevamente.

Irma Gobb viene a cenar, pero Mr. Bean se queda dormido en el baño y, como resultado, el pavo está muy quemado. Intenta cocinar espaguetis pero no caben en la olla y en su lugar usa su bañera para cocinar los espaguetis, pero accidentalmente los deja caer por el desagüe cuando un ave choca contra la ventana. Decide hacer que el ave sea su cena, pero es demasiado pequeña, así que la infla para que parezca un pavo. Cuando esto falla, Bean e Irma intentan atrapar y comer un ratón cercano.

Durante un juego de tenis jugado por un padre y su hijo, la pelota se atasca en un tubo de desagüe en una azotea. Después de varios intentos fallidos de recuperar el balón, una vecina preocupada llama a emergencias cuando juzga mal al Sr. Bean pensando que está asaltando el edificio hasta que logra obtener el balón saltando en un trampolín. Más tarde, el padre le dice a Bean que vuelva a recoger la pelota, pero en lugar de eso lanza un huevo por error y, como resultado, el padre enfurecido lo persigue.

Cuando Mr. Bean come palomitas mientras ve televisión, uno de sus dientes se rompe y le causa mucho dolor. Piensa que sacarse el diente resolverá sus problemas mientras intenta extraerlo de muchas maneras diferentes. Más tarde en la noche, Bean come unas palomitas de maíz mientras mira y finalmente sale el diente, pero emite un silbido cada vez que respira por la brecha en la boca, por lo que intenta volver a poner su diente usando el pegamento, pero pega el botón por el lado equivocado en su dedo. Para el último intento usa un juguete de cuerno de Triceratops como un diente. Cuando Bean mira sus dientes al día siguiente, decide ir a un dentista para que le extraigan el diente y lo reparen. Sin embargo, cuando Bean intenta arreglar el cuerno de juguete Triceratops fuera de lugar, intenta quitar las partes hasta que accidentalmente golpee su diente, causándole dolor una vez más.

Mr. Bean salva al gatito de un árbol y el propietario le agradece haber salvado a su gatito y le da una recompensa. Cuando la fotografía de prensa y el dueño del gatito llegan a su puerta para tomar una fotografía, decide hacer que un corte de cabello sea más hermoso cuando el cabello está desordenado. Sin embargo, cuando el barbero es demasiado lento para cortar el cabello, decide cortarselo el solo, pero sin darse cuenta, se corta todo el pelo, y se queda calvo. Intenta esconder su cabello hasta que ve que la peluca del fotógrafo vuela y la roba y pinta de negro. Cuando el Sr. Bean y el propietario están a punto de hacerse una foto, una ráfaga de viento se lleva el cabello falso y Bean inmediatamente pone al gato en su cabeza, al peluquero le gusta la foto y usa el corte de gato de Bean para cortarlos a los clientes.

Mr. Bean ve su programa favorito en la televisión, pero los ruidos de los Bruisers lo distraen, incluso cuando lleva su televisor alrededor de su apartamento en un intento de huir de los ruidos. El espectáculo termina al llegar al armario (el único lugar absolutamente tranquilo), lo que enoja a Bean hasta el punto de vengarse grabando todos sus ruidos y usándolos por la noche para mantenerlos despiertos.

El Mini ya no funciona, por lo que el Sr. Bean se ve obligado a venderlo al depósito de chatarra. Sin saberlo Bean, el propietario quita el aceite del motor y lo roba. Bean luego compra un globo aerostático y lo pinta del mismo color que el Mini, pero cuando ve el Mini en la carretera, se da cuenta de que el propietario lo robó, así que se lo quita y finalmente puede conducirlo de nuevo.

Mr. Bean celebra su cumpleaños en un lujoso restaurante con Teddy, sin saber que tiene que cenar con una pareja de famosos. Cuando el camarero se lesiona al resbalarse en el suelo, Bean se mete involuntariamente en la cocina y el actor estrella pide una langosta del acuario del restaurante. Desafortunadamente, la langosta se ha escapado, por lo que intenta hacer una langosta improvisada con zanahorias que enfadan al actor que golpea a Bean. Cuando intenta acabar con Bean, la langosta lo ataca y lo persigue. Luego, Bean y la actriz salen del restaurante y son recibidos por los paparazzi cuando la actriz lo besa.

Mr. Bean visita un museo de arte, pero no le gustan las imágenes y estatuas desnudas. Cuando ve a un hombre que intenta robar un retrato de una flor, le toma una foto pero le toma tiempo revelarla. Cuando se revela la foto, ve que el retrato ya se ha ido y cree erróneamente que el ladrón lo ha robado, lo que hace que Bean se vaya a París en una búsqueda de una milla de largo. Más tarde, resulta que el artista fue quien tomó el retrato para limpiarlo y Bean logra capturar al ladrón.

Mr. Bean conduce a un cine donde en parte ve dos películas de terror tituladas "Kat" y "The Glob", que lo asustan tanto que decide ver "Mr. Tiny" durante el cual se queda dormido. Cuando llega a casa, intenta entrar pero se da cuenta de que dejó su chaqueta con las llaves de su casa en el cine. Para empeorar las cosas, Bean ve a Scrapper como el gato gigante y a la Sra. Wicket como el monstruo del mundo y se escapa conduciendo de regreso al cine donde intenta colarse en la película, pero el cajero se revela como un Hornet gigante en la pelicula Mr. Tiny. Mr. Bean y Tiny trabajan juntos para sobrevivir y tener éxito en hacerlo. El dúo luego se sube al letrero "THE END", pero Bean se cae cuando sube a la N, momento en el que se despierta de lo que resultó ser solo una pesadilla.

Mr. Bean e Irma van a una cita. El problema es que tienen diferentes nociones de lo que hacer en una cita. Después de comer en un restaurante, Bean se da cuenta de que dejó su billetera en casa, así que va a buscarla, pero el músico usa sus propias 20£ para pagar la factura y tener un baile romántico con Irma. Cuando Mr. Bean ve que Irma y el músico van al auto, al ver salir el Reliant azul, lo confunde con un auto en el que está Irma y lo persigue. Cuando Irma y el músico están a punto de besarse, se interrumpen cuando el Reliant Supervan choca contra el auto del músico. Irma decide volver al auto de Bean e Irma y Bean se van riendo mientras el músico golpea al conductor del Reliant Supervan por dañar su auto.

Un convicto fugado que se parece al Sr. Bean se refugia en el departamento de Bean, lo que hace que la policía arreste a Bean por error, mientras que el convicto se hace pasar por Bean. Mientras el verdadero Bean está en prisión, la Sra. Wicket (quien no se da cuenta de su identidad) obliga al convicto a hacer Rockery. Cuando el convicto está harto de este trabajo, regresa a su celda de la prisión y le explica a Bean la situación. Cuando está fuera de la cárcel, Bean grita "¡Soy libre!" Lo que atrae la atención de los guardias de la prisión.